Menu

Friday, January 9, 2015

YO SOY LO QUE SOY, NO LO QUE TU CREES QUE SOY, PERO A VECES TODO LO CONTRARIO...


Esto es lo que yo soy. Es increíble de cuantas veces lo he tratado de modificar… es mas increíble aún que conductas que hemos aprendido de niños, nos persiguen a lo largo de nuestras vidas, al punto de incapacitarnos en ciertas áreas y hacernos sentir presos de nosotros mismos. He tenido tantos momentos de lucidez con respecto a mi cuerpo, y luego entro de nuevo en lo que el mundo espera de mí, en las expectativas de lo que debería de ser según las revistas, las películas y la fiebre del fitness. Cuando mi principal y lógica meta debería ser, tener un cuerpo sano para tratar de durar potencialmente más años con buena calidad de vida.

Hoy le doy gracias a Dios por esta maravilla que creó que se llama Romina, así como te creó a tí que también eres un@. Soy una mujer sana, con brazos, piernas, órganos intactos. Un cuerpo activo que puede hacer deporte cuando le apetece, puede trabajar largas horas si así lo necesita, puede descansar y repararse profundamente, puede dormir apaciblemente, puede orar y cantar, puede tener intimidad con el hombre que ama, un cuerpo fértil y maravilloso. Un cerebro que aunque olvidadizo, me sorprende con análisis que transcienden hasta mi propia naturaleza humana. Y lo mas importante, un espíritu inquebrantable que conoce a Dios y que descansa en El, confía en El y entiende que en esta vida lo que importa es el amor, dar dar dar amor. Al que conoces y al que no, al que lo merece y al que te agrede, al que piensa igual que tu y al que te humilla por como vives tu vida.

Yo sigo lidiando con momentos en mi camino, en que me critico y pienso que mi valor depende de lo que dice mi espejo y mi balanza, pero esto es un cuerpo, y Romina es mas que eso, es lo que se esconde detrás de mis ojos que no se puede explicar con palabras, es de lo que habla mi boca, son esas lágrimas que a veces se escapan sin permiso, es esa sensación que explota en mi cuando recibo un abrazo o cuando veo las maravillas de la creación. Es esa conexión que siento con este planeta, con los animales y con las personas que me rodean. Es esa alarma que se despierta en mí cuando critico injustificadamente a otro, cuando soy egoísta, cuando me apego al dinero… que me recuerda que no es para eso que estoy aquí. Es cuando me vuelvo un ocho y me desenredo nuevamente, es cuando cambio de parecer, es cuando repito mil veces las cosas y mi esposo se molesta, es cuando lloro con facilidad….esa mezcla de profunda sensibilidad junto con esa poca flexibilidad, todo eso soy yo. Y amo quien soy, no solo eso…amo en quien me voy convirtiendo gracias a el impacto de reconocer lo que Dios ha hecho con mi vida. No vivo con temor a El, vivo tratando de demostrar el amor que su presencia me hace sentir.

Quiero ser libre dentro de mi cuerpo y lo voy a ser, por eso escribo esto en un momento de lucidez donde estoy clarísima de quien soy y lo que pienso con respecto a todo. Puede que mañana el mundo me confunda, pero me da tranquilidad saber que siempre volveré a este momento de plena verdad. Esta bandera con la que conquisté un aprendizaje. Que nadie diga que porque es una conducta aprendida, tus hijos lo “tienen” que heredar. Hay que superar estas inseguridades que hemos hecho parte de nuestro carácter, para que tus hijos no tengan que pasar por eso, de eso se trata el despertar de la consciencia humana…mejorar la raza, para que en el futuro nuestros hijos puedan generar el cambio que este mundo tanto necesita. El nivel de destrucción con el que estamos devastando la tierra, es mil veces mas rápido que el despertar de consciencia que estamos experimentando…y eso a la larga, tal vez no a ti, pero a los hijos de los hijos de tus hijos los va a dejar sin un lugar para vivir. Toma responsabilidad de tu vida y cada una de tus acciones porque todas tienen un impacto y una consecuencia a largo plazo. La pequeña modificación que crees que no generará nada, puede impactar generaciones por venir. Eres un ser taaaan valioso, y Dios te ama tanto. Deja de pensar en tu insignificancia y pon manos a la obra, educa a tus hijos con los valores que de verdad importan, no con lo que el mundo te dice que les enseñes, brindales música de calidad, enséñales compasión hacia el enfermo, el necesitado, el preso, el adicto…. pinta con ellos, ponlos en contacto con la naturaleza, muéstrales el valor y el respeto hacia los animales y las plantas, háblales de la oración, y lo mas importante infúndeles que el amor es lo principal y que cuando todo se hace con amor desinteresado…nos damos cuenta que nuestra realidad cambia instantáneamente y el mundo aún tiene esperanza.

Esta vida es mía, y cada segundo de mi tiempo es una posibilidad…siento que mi corazón quiere explotar de tantas emociones, es como si por un segundo pudiese sentir el amor en todo. Hoy soy una Romina en proceso de continuo cambio, y me siento profundamente feliz con eso.

Con Amor,
Romina